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Las ventas de maíz están paralizadas en el mercado interno y los precios de los cereales han comenzado a mostrar movimientos diferenciados entre los mercados monitoreados por Cepea –predominando las caídas–. En las regiones donde el maíz se depreció, la presión provino principalmente de la retracción de los compradores, que prestaron atención al avance de la cosecha y al menor ritmo de las exportaciones.
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Según el boletín de Cepea, algunos solicitantes están a la espera de entregas de lotes negociados previamente. En São Paulo, específicamente, la menor presencia de compradores y la oferta de otros estados resultaron en devaluaciones en muchos lugares del estado. En la región de Campinas (SP), el indicador ESALQ/BM&FBovespa cayó 2,2%, cerrando en R$ 99,10/sc de 60 kg el viernes 6. En lugares donde el movimiento aún era alto – como Recife (PE), Barreiras ( BA), Joaçaba (SC), Ponta Grossa (PR) y Marília (SP) –, el apoyo vino del mayor interés de los compradores y de la resistencia de los vendedores en la negociación de nuevos lotes. En Paraná, los valores se vieron sostenidos especialmente por las incertidumbres sobre el suministro – vale recordar que este fue uno de los estados más afectados por las adversidades climáticas este año.Por: Aline Merladete | Agroenlace
