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En Pará, a diferencia de la mayoría de las regiones productoras, hubo aumento de la superficie sembrada y aumento de la productividad media con relación al ciclo anterior. Las condiciones fueron favorables para el cultivo en las fases más críticas de desarrollo, permitiendo una mejor producción que la temporada pasada, alcanzando las 54,9 mil toneladas cosechadas.
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En Rio Grande do Norte, el cultivo de sorgo con doble aptitud se ha convertido en una de las principales alternativas de alimento voluminoso para el ganado, especialmente el vacuno, ya que la mayor parte de la producción de la planta se destina a la alimentación animal (forraje). Como el relevamiento solo considera sorgo grano, se estima en la actual cosecha una superficie de 600 hectáreas, manteniendo así la estabilidad. Por otro lado, la producción estimada de granos fue 16,7% inferior a la cosecha 2020, alcanzando las 500 toneladas.
Sin embargo, debido al precio del maíz, la demanda de ensilaje para alimentación animal es mayor, por esta razón, la facilidad de manejo y la baja producción hacen que valga la pena utilizar o vender parte de los cultivos para ensilaje. Como resultado, la producción final fue inferior a la esperada. En general, se estima una reducción de la producción total respecto a 2019/20, debido a las condiciones climáticas adversas y sus impactos en el rendimiento promedio de los cultivos. Así, incluso con un aumento en el área plantada, la perspectiva es obtener un volumen 5,2% inferior al del ciclo anterior, quedando en 148,2 mil toneladas cosechadas.
En Mato Grosso, la cosecha de sorgo finalizó en agosto, finalizándose las 20% restantes este mes, e incluso este cultivo, que suele ser más resistente al clima seco, sufrió sequía esta temporada y registró una productividad promedio de 2.670 kg/ha. 9,9% inferior a los 2.964 kg/ha obtenidos en el último ciclo. Ni siquiera las mayores inversiones aplicadas al cultivo de sorgo fueron suficientes para revertir la pérdida. Como sustituto del maíz en la formulación de alimentos para animales, sus precios se han disparado a nivel estatal, dada la restringida oferta de este insumo, rompiendo muchas veces con la tradicional equiparación de alrededor de 80% en el precio del maíz. Estas condiciones del mercado incentivaron el aumento de la superficie, cuyo monto fue de 49,3 mil hectáreas, 5,7% superior al año pasado. En este momento las ventas ya superan más de la mitad de la producción cosechada.
En Mato Grosso do Sul, los problemas climáticos que experimentó el cultivo durante el ciclo impactaron directamente en el rendimiento del grano. Sin embargo, el importante aumento de la superficie sembrada en este ciclo cambió por completo el panorama esperado para la cosecha. Aproximadamente 68% de las áreas ya han sido cosechadas, y están representadas básicamente por cultivos establecidos en la región centro-norte del estado. En el centro-sur, donde las cosechas están retrasadas, el operativo se realizará básicamente en septiembre. En general, la previsión es que la producción sea 89,4% superior a la de 2019/20, esperándose que alcance las 68,2 mil toneladas.
En Goiás, la falta de lluvias redujo el potencial de los cultivos, reduciendo con ello la productividad y la calidad de los granos. Además, debido a la falta de almacenes, los costos logísticos obligan a los productores a vender sus productos en la finca. Se estima un aumento de 0.8% en el área plantada, y una disminución de 18.1% en productividad y 17.4% en producción con relación al ciclo anterior.
En el Distrito Federal, el área cultivada disminuyó en 1% con relación al ciclo anterior. Los cultivos están en plena cosecha, ya que el 50% ya ha sido cosechado. La productividad promedio se estima en 4.240 kg/ha, 14,9% inferior a los 4.980 kg/ha obtenidos en la cosecha anterior, reducción provocada por la falta de lluvias en las etapas de floración y llenado de grano. Así, la producción podría llegar a 41,6 mil toneladas, 15,6% inferior a la producción de la cosecha anterior.
En Minas Gerais, se estima que las áreas de sorgo se redujeron en 2,4%. El área de 195,9 mil hectáreas tiene una productividad esperada de 2.901 kg/ha, 25,6% inferior a la cosecha anterior. La producción estimada es 27,4% inferior a la cosecha 2019/20. A pesar de ser un cultivo con mayor resistencia al clima, los efectos del déficit hídrico y las heladas indican potencial de reducciones hasta el final de la cosecha. La etapa de cosecha del sorgo en el estado es 74%.
En São Paulo hubo estabilidad en la asignación de área para la siembra del cultivo, sin embargo la productividad promedio debería estar muy por debajo del potencial esperado debido a las adversidades climáticas registradas durante el ciclo (falta de lluvias, baja humedad del suelo y heladas). Por tanto, el volumen final esperado es 27,3% inferior al obtenido en 2019/20, con un estimado de 25,3 mil toneladas cosechadas.
Por: Eliza Maliszewski | Agroenlace
