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Se espera que la cosecha de arroz 2020/21 sea 4% mayor y totalice 11,63 millones de toneladas, en una superficie de 1.684 mil hectáreas, un aumento de 1,1% respecto a la cosecha anterior. La productividad media nacional es de 6.905kg/ha, un aumento de 2,9%. El dato fue registrado por la Empresa Nacional de Abastecimiento (Conab).
La cosecha comenzó en marzo y prácticamente está terminada en los estados productores. Esta cosecha, los altos precios de los granos motivaron a los productores a invertir en el cultivo
A lo largo de 2021, las perspectivas son que se restablezcan los stocks en tránsito, como consecuencia de la retracción proyectada del consumo por las estimaciones de recuperación económica. En cuanto a la balanza comercial, la proyección de altos precios, sumado al fortalecimiento estimado de la moneda nacional, reducirá el ritmo de exportaciones identificadas en la cosecha 2019/20 y la proyección es que el país venderá 1,3 millones de toneladas en la campaña 2020/ 21 cosecha. Así, la expectativa es que el período termine con un leve superávit de 200 mil toneladas en la balanza comercial de granos, con importaciones de 1,1 millón de toneladas para el mismo período.
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Por regiones
En la Región Norte, la previsión es un aumento del área plantada en 2,0% respecto a la cosecha anterior, aumentando potencialmente la producción, que actualmente se estima en 1.054,3 mil toneladas (un aumento de 6,3% respecto a la última cosecha). Como resultado, la región debería convertirse en el segundo mayor productor de arroz del país, siendo la producción de Tocantins la más destacada.
En el Estado, el arroz de riego, primera cosecha, tuvo promedios de productividad que oscilaron entre 90 y 120 sacos/ha. Hubo una variación de productividad de alrededor de 5,7% respecto a la última cosecha, 2019/20. Para lograr esta variación, el productor invirtió en fertilización, uso de nuevas variedades y mejora en el manejo del cultivo, todo ligado a las buenas condiciones climáticas, que contribuyeron al buen desarrollo del cultivo.
El punto culminante negativo está en Mato Grosso. En la primera cosecha, especialmente en febrero y marzo, combinado con un manejo inadecuado para un paquete de alta tecnología, culminó con la aparición de un alto porcentaje de granos dañados y una cantidad de granos integrales no estándar, en comparación con las cosechas recientes. Aun así, la productividad media obtenida no experimentó descensos, limitándose los problemas a parámetros cualitativos, obteniendo 3.476 kg/ha, siendo el resultado incluso ligeramente superior al registrado en la última cosecha, en gran medida debido a las crecientes inversiones financieras aplicadas a la producción. cultivo. Con una superficie sembrada de 114 mil hectáreas, la producción cosechada fue de 396,3 mil toneladas, y la entrada de oferta ha presionado los precios en las regiones de Sorriso y Sinop.
En Rio Grande do Sul, principal productor, la cosecha de arroz está cerrada. Las condiciones climáticas fueron ideales para las operaciones, ya que el volumen de lluvia, aunque cercano a lo normal, se concentró en unos episodios de gran intensidad. Como resultado, la productividad promedio se mantuvo igual que en el relevamiento anterior, convirtiéndose esta en la cosecha con mayor productividad jamás registrada. Esto se debe a algunos factores como: buenas condiciones de temperatura y luz durante el ciclo del cultivo, rotación con soja, siembra en el período recomendado, eliminación de áreas marginales o áreas fuertemente infestadas por invasores, además de la constante evolución de los productores en términos de gestión y tecnologías. .
Por: Eliza Maliszewski | Agroenlace