El Parlamento Europeo aprobó el martes un aplazamiento de un año de la histórica ley contra la deforestación, que entrará en vigor a partir de diciembre de 2025. Como resultado, la legislación prohibirá la importación de carne de vacuno, soja y otros productos vinculados a la destrucción de los bosques. .
Además, con la aprobación de los legisladores, se espera que los países de la Unión Europea también aprueben el aplazamiento a finales de esta semana. Este paso se considera una formalidad y, por tanto, no debería traer ningún cambio. Finalmente, tras este paso, el aplazamiento se hará oficial.
¿Por qué es importante?
El aplazamiento de la que es la primera política global destinada a combatir la deforestación representa un golpe a la agenda medioambiental de la Unión Europea (UE). La legislación ha enfrentado la resistencia de varias industrias, como la automotriz y la aérea, que argumentan que las medidas son demasiado onerosas.
Por otro lado, el aplazamiento ofrece un alivio temporal a las empresas y países que se opusieron a la política. Naciones como Brasil e Indonesia han calificado la ley de proteccionista y advirtieron que podría excluir a millones de pequeños agricultores del mercado europeo.
Cuando entre en vigor, la ley exigirá que las empresas y comerciantes que vendan soja, carne de res, café, aceite de palma y otros productos en la UE demuestran que sus cadenas de suministro no están vinculadas a la deforestación. También se prohibirá a los agricultores europeos exportar productos de zonas deforestadas o degradadas.
Contexto
Las propuestas para debilitar partes de la ley fueron descartadas durante las negociaciones entre los legisladores y los países de la UE. Ambas partes llegaron a un acuerdo a principios de este mes para retrasar la implementación durante 12 meses.
Paralelamente, las negociaciones sobre un tratado global para reducir la contaminación plástica tampoco lograron avanzar en una reunión celebrada el lunes.
En números
Según el grupo de campaña Global Witness, la deforestación vinculada a las importaciones de productos básicos de la UE provocó al menos 120 millones de toneladas métricas de emisiones de CO₂ entre 2021 y 2022.
Fuente: Kate Abnett y Bart Meijer | Noticias Agrícolas