La semana pasada, incluso con el ritmo de las exportaciones de maíz aumentando, las cifras todavía estaban por debajo de las registradas el año pasado. En Paraná, uno de los principales productores, ya se cosecharon 92% del área destinada a la segunda cosecha de 2024. Sin embargo, con las caídas de precios en Chicago y en BM&F, que afectan directamente al mercado físico, la intención de vender maíz se desaceleró, aumentando las pérdidas del commodity, según un análisis de Grão Direto.
Grano Directo apunta estabilización en el precio del ganado de carne, indicando un posible fin de la fase baja del ciclo ganadero. Esta recuperación podría mejorar los márgenes de los ganaderos, haciéndolos más competitivos a la hora de comprar maíz. Además, con la recuperación de los precios de la arroba, las fábricas de piensos, que han adoptado una postura cautelosa a la hora de comprar, podrían empezar a acumular existencias para fin de año, lo que debería aumentar la demanda del cereal.
Expectativas de caída de precios en medio de una demanda negativa
Sin embargo, según el análisis, la comercialización del maíz en Brasil enfrenta desafíos. Los productores están reteniendo el grano con la esperanza de obtener mejores precios, lo que ha apoyado los precios en el mercado físico. La demanda internacional de maíz brasileño es considerablemente más débil en comparación con el año pasado y los compradores nacionales tampoco muestran urgencia en adquirir el producto. La llegada de la cosecha norteamericana y la caída de precios en Chicago hacen prever un escenario de devaluación tanto en el mercado externo como en Brasil.
El país depende en gran medida de los ingresos en divisas provenientes de las exportaciones de granos, mientras que el gobierno lucha por apuntalar las menguantes reservas del banco central. Sin embargo, no se espera que el clima sea lo suficientemente severo como para dañar significativamente la producción. El USDA, a través del informe WASDE, debería indicar una productividad de 182,5 bushels por acre, ligeramente superior a los 181 bushels por acre pronosticados inicialmente. Este escenario todavía deja espacio para caídas en los precios del maíz en el CBOT, según Grão Direto.
Con base en los factores antes mencionados, es probable que el mercado del maíz enfrente otra semana negativa, aunque no tan pronunciada como las caídas observadas la semana pasada, según los datos del análisis.
Fuente: Seane Lennon | Agroenlace
