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India ha establecido límites a las existencias de harina de soja desde el 23 de diciembre de 2021 hasta el 30 de junio de 2022, en un intento de contener el aumento de los precios internos, según un informe del Servicio Agrícola Exterior del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA). Para fábricas, molinos y procesadores, el inventario máximo permitido es de 90 días de producción, de acuerdo con sus capacidades de producción de insumos diarios.
Para las empresas comerciales, sólo las empresas registradas por el gobierno son elegibles para almacenar harina de soja, con un límite máximo de existencias de 160 toneladas con un lugar de almacenamiento definido y declarado. Imponer límites de inventario probablemente evitará el acaparamiento y garantizará la disponibilidad de productos para las trituradoras domésticas, según asociaciones comerciales e industriales. Los procesadores de soja normalmente no almacenan harina de soja debido al alto precio económico.
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Con una producción nacional de soja estimada en 11,9 millones de toneladas, no está claro cómo los límites de inventario de harina de soja, a diferencia de la soja, garantizarán la corrección de precios, dijo el USDA, y mantendrán la disponibilidad para los fabricantes de piensos compuestos. "Imponer límites de inventario a la harina de soja podría reducir la trituración, lo que a su vez conduciría a una mayor disponibilidad de soja y potencialmente mantendría los precios de la soja bajo control", dijo el USDA.
Los precios internos de septiembre a diciembre de 2021 oscilaron entre $ 706 y $ 892 por tonelada, en comparación con el precio mínimo de sostenimiento de $ 526 por tonelada. En el mismo período, los precios de la harina de soja variaron entre $ 693 y $ 799 por tonelada. Una cosecha abundante en Brasil que llegará en febrero de 2022 podría resultar en una moderación de los precios globales, dijo el USDA. Las diversas asociaciones de la industria avícola de la India acogieron con satisfacción la medida. Las empresas avícolas nacionales fueron las más afectadas por el aumento de los precios de los piensos.
Por: Leonardo Gottems | Agroenlace