En 2023, Rusia registró un hito importante en las exportaciones de aceite de colza, alcanzando 1,7 millones de toneladas. Esta impresionante cifra representa un aumento de 72% respecto al año anterior, según destaca el Ministerio de Agricultura ruso. Esta expansión de las exportaciones refleja un crecimiento sólido de la demanda mundial, especialmente de China, que se ha convertido en el principal destino de este producto básico. Las compras chinas se duplicaron con creces, alcanzando 1,46 millones de toneladas.
Si bien Europa siempre ha sido un importador tradicional de aceite de colza ruso, la participación del continente en las exportaciones totales está disminuyendo. Esto sugiere un cambio en los patrones comerciales, con Rusia diversificando sus mercados de exportación.
Un factor decisivo detrás de este aumento es el volumen récord de producción en Rusia. Según Mikhail Maltsev, director ejecutivo de la Unión Rusa de Aceites y Grasas, el país produjo alrededor de 1,5 millones de toneladas en la temporada 2022/23, un aumento de 75% en comparación con la temporada anterior. Casi la totalidad de este volumen se destinó a la exportación, lo que pone de relieve la orientación de Rusia hacia los mercados exteriores.
Las proyecciones para 2023/24 indican una producción de 1,4 millones de toneladas de aceite de colza. Con un consumo interno relativamente bajo, menos de 50.000 toneladas anuales, Rusia planea seguir centrándose en el comercio internacional. Este plan de exportar la mayor parte de la producción subraya la posición estratégica del país en el mercado mundial del aceite de colza. Con estas acciones, Rusia no sólo está fortaleciendo su economía agrícola, sino también consolidándose como un actor importante en el comercio internacional de commodities agrícolas.
Por: datagro