El Instituto Nacional de Meteorología (Inmet) publicó datos cruciales en el boletín número 5, que apuntan a un debilitamiento de El Niño y posibles cambios climáticos en Brasil para el año 2024. En colaboración con la Agencia Nacional de Agua y Saneamiento Básico (ANA) y la Centro Nacional para la Gestión de Riesgos y Desastres (Cenad), el informe destaca las predicciones e impactos del fenómeno.
El informe indica un fenómeno de El Niño fuerte, pero predice que se debilitará hasta alcanzar una intensidad débil en los próximos meses. Se prevé una posible transición a La Niña en la segunda mitad del año. Esta información, basada en datos de Inmet, es crucial para la toma de decisiones gubernamentales y las acciones de gestión de riesgos en todo el país.
Los modelos climáticos globales predicen una alta probabilidad de que El Niño persista en el Pacífico Ecuatorial hasta abril de 2024, con una certeza de 98%. Sin embargo, se pronostica un paulatino debilitamiento del fenómeno, con intensidad que variará de moderada a débil, y anomalías de temperatura inferiores a 1,4ºC en el Pacífico Central.
Debilitamiento de El Niño y perspectiva de La Niña en 2024
Las proyecciones del IRI indican neutralidad en abril-junio de 2024 para la temperatura de la superficie del mar, con una probabilidad de 66%. Sin embargo, a partir de la segunda mitad del año, existe una probabilidad superior a 50% de que se forme el fenómeno de La Niña.
Las lluvias del 23/diciembre y 24/enero aumentaron la humedad en el suelo y en los ríos, especialmente en el sur de la Región Norte y en el centro de Brasil. Por tanto, en febrero de 2024 se espera una humedad del suelo estable. Además, en la Región Sur se espera alta humedad.
Sin embargo, no se esperan aumentos en los niveles de agua del suelo para febrero en las zonas central y oriental de la Región Nordeste, noroeste de la Región Norte y norte de la Región Sudeste.
Fuente: Aline Merladete | Agroenlace