El dólar subía este martes frente al real y superó los 5,20 reales, al final de un trimestre marcado por la cautela en el exterior y la tensión política en Brasil.
A las 10:21, el dólar avanzaba 0,12%, hasta 5,1878 reales en venta. En una sesión de incertidumbre, la moneda tocó 5,2083 reales en el máximo del día, pero cayó a 5,1698 en el mínimo antes de volver a cerca de 5,20 reales.
En el B3, el principal contrato de futuros del dólar tuvo una variación positiva de 0,03%, a 5,197 reales.
"La preocupación por el coronavirus continúa, especialmente con los primeros resultados de marzo que muestran el impacto real en los inversores", dijo la correduría Empiricus en una publicación en Twitter. Los efectos de la pandemia en las cadenas de suministro y la actividad empresarial ya son un factor que ha impulsado el dólar en casi 30% frente a la moneda brasileña en 2020, ante una inminente recesión global que aumenta la demanda de activos seguros.
"Pero, mientras el mundo sigue cerrando sus puertas y paralizando sus operaciones, China, el epicentro inicial de la enfermedad, está empezando a recuperarse", añadió Empiricus.
La actividad industrial de China se expandió inesperadamente en marzo después de un colapso el mes anterior. El índice oficial de gerentes de compras (PMI) de China subió a 52,0 en marzo, desde un mínimo histórico de 35,7 en febrero, informó el martes la Agencia Nacional de Estadísticas del país.
El indicador se situó por encima de la marca de 50 que separa el crecimiento de la contracción.
Ante la cautela internacional, pero aún atentos a las tímidas señales de recuperación en la segunda economía del mundo, el dólar tuvo este martes un comportamiento mixto frente a los pares de riesgo. El rand sudafricano y la lira turca subieron ligeramente frente a la moneda estadounidense, mientras que el peso mexicano estuvo cerca de la estabilidad y el dólar australiano perdió más de 1%.
En el escenario interno, la posición del presidente Jair Bolsonaro sobre la respuesta al Covid-19 siguió en el foco de los inversores.
Recientemente, Bolsonaro ha reforzado su opinión de que las actividades económicas no pueden detenerse y que las personas fuera del grupo de riesgo de enfermedad deberían volver a trabajar con normalidad, a pesar de las recomendaciones de las autoridades sanitarias y de los gobiernos regionales, que alientan el aislamiento social.
Según los analistas, los desacuerdos entre las autoridades brasileñas sobre cómo abordar la pandemia contribuyen a la incertidumbre, impulsando la búsqueda de seguridad.
La víspera, la moneda al contado norteamericana registró una ganancia de 1,47%, a 5,1815 reales en venta, el segundo precio de cierre más alto.
Fuente: Noticias Agrícolas