Los productores de trigo de las principales regiones productoras brasileñas están en alerta por las condiciones climáticas. Al fin y al cabo, en Rio Grande do Sul, Emater informa que, a medida que avanza la cosecha, la calidad y la productividad inicialmente esperadas están disminuyendo, debido al tiempo lluvioso.
Además, en Argentina, un importante productor de trigo, la sequía que afectó parte de los cultivos en la actual temporada redujo la producción local, lo que debería limitar el volumen disponible para la exportación. Por tanto, la situación del mercado del trigo es desafiante, tanto en Brasil como en Argentina.
Sin embargo, es importante resaltar que, a pesar de las dificultades climáticas, los productores de trigo continúan monitoreando de cerca la situación y buscando soluciones para mitigar los impactos negativos. Más adelante podremos comprender mejor los efectos de esta situación en las cadenas de suministro de trigo.
Según la reciente estimación publicada por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) este mes, se espera que la producción de trigo en Argentina totalice 14,5 millones de toneladas, lo que representa una reducción de dos millones de toneladas respecto de la previsión de octubre. El escenario actual está afectando los precios del trigo en Brasil. Los agentes consultados por Cepea pronostican un movimiento de recuperación continuo en las próximas semanas. Esto se debe a la influencia de estos factores en el mercado del trigo en Brasil, lo que genera expectativas optimistas.
La incertidumbre sobre el clima y la producción argentina está generando volatilidad en el mercado, ya que el trigo es un componente fundamental en la cadena alimentaria e industrial. Los productores brasileños de trigo están atentos a la evolución climática. También siguen las tendencias del mercado internacional. Todo para tomar decisiones informadas sobre la cosecha y los precios.
Fuente: Aline Merladete | Agroenlace