En Brasil se sembrarán 52,5 millones de hectáreas de cultivos transgénicos en esta cosecha 2016/17, entre soja, maíz (verano e invierno) y algodón. Esto es lo que señala el informe “2º estudio sobre la adopción de biotecnología agrícola en Brasil”, publicado por Consultoria Céleres el 9 de diciembre. La adopción de organismos genéticamente modificados (OGM) deberá mantener prácticamente el mismo número que en el informe anterior, con 93,4% del total del área sembrada.
Según Céleres, el evento (RI/TH) alcanzará 32,0 millones de hectáreas, sumando los tres cultivos analizados, lo que representa una tasa de adopción de 65,1%. Esta tecnología tenderá a ser cada vez más dominante entre las culturas actuales. El número de tecnologías aprobadas con genes combinados llegó a 27 (46,5% del total), sólo una para soja, 22 para maíz y 12 para algodón.
“En total, hay 58 eventos aprobados para su comercialización (ocho resistentes a insectos, 19 tolerantes a herbicidas, 27 con genes combinados, uno resistente a enfermedades, uno para aumentar la productividad, uno para aumentar el rendimiento industrial y uno tolerante al estrés hídrico). Cabe recordar que en octubre la CTNBio, por primera vez, aprobó con fines de importación (y no de cultivo) tres eventos de maíz genéticamente modificado –uno tolerante al herbicida glifosato, otro tolerante al estrés hídrico y otro con fines industriales–, promoviendo el aumento del rendimiento de la producción de etanol. Este tipo de eventos se aprobaron como excepción, para atender la demanda de cereal de este año”, señala la Consultora.
La soja stack, que hasta el momento sólo tiene un evento aprobado, es la tecnología más cultivada en el país, con 20,2 millones de hectáreas en la cosecha 2016/17. “Como se señaló en el informe anterior, los beneficios para los productores de soja son claros, tanto en el aspecto económico como en la mejora del manejo y facilidad de producción. Sin embargo, la productividad aún no ha alcanzado su máximo potencial, manteniéndose similar a la tecnología TH”, explica Céleres.
La superficie con cultivares de soja transgénica se mantendrá en 32,7 millones de hectáreas indicadas en el informe anterior. El maíz (verano + invierno) seguirá en segunda posición, alcanzando 15,7 millones de hectáreas. El maíz de invierno genéticamente modificado alcanzará 91,8% del área total sembrada, o 10,4 millones de hectáreas. Los eventos RI/TH alcanzarán los 7,1 millones de hectáreas (pero con la misma tasa de adopción anterior de 62,4%).
En el caso del maíz de verano, cifras del segundo relevamiento de la cosecha 2016/17 arrojan un total de 5,3 millones de hectáreas, o 82,3% de adopción. “Cabe recordar que la adopción del maíz de verano probablemente se mantendrá a este ritmo, pues la adopción del producto transgénico en la región centro-sur (donde la concentración de agricultores de tecnología media a alta es mayor) ya llegó a su límite, con 95.5%. Además, para las regiones Norte y Nordeste (donde el uso de tecnología aún es bajo), la perspectiva de una mayor adopción es baja (alrededor de 61,1%)”, señala la encuesta.
Fuente: Agroenlace