El gobierno argentino ha suspendido, hasta nuevo aviso, nuevas solicitudes de licencias de exportación de cereales y oleaginosas, en medio de especulaciones sobre posibles medidas económicas del nuevo presidente del país, Javier Milei, según informó AgriCensus.
A las 5 de la tarde hora local del 11 de diciembre implementaron oficialmente la suspensión luego de un día de altas ventas de maíz. Los exportadores, anticipando una posible devaluación de la moneda local que se anunciaría en el informe del 12 de diciembre, intentaron pagar impuestos a las exportaciones al tipo de cambio actual de 360 pesos/US$.
Las licencias de exportación de maíz alcanzaron 1,7 millones de toneladas el 11 de diciembre, alcanzando un pico de 2 millones de toneladas el 6 de diciembre, según datos del analista Javier Preciado Patiño.
Patiño, en declaraciones a AgriCensus, esperaba que las exportaciones alcanzaran los 36-38 millones de toneladas mientras Argentina siembra la cosecha de maíz 2023/24. La cosecha total de maíz de Argentina se espera que sea de 50 millones de toneladas, según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (Bage).
Argentina considera cambios a impuestos a las exportaciones de productos agrícolas
En el momento de redactar este informe, los tipos de exportación eran: 33% para la soja, 31% para la harina de soja y 12% para el aceite de soja, el maíz y el trigo.
Desde la elección de Milei el 19 de noviembre, las solicitudes de licencias de exportación (DJVE) hasta el 11 de diciembre sumaron 10,2 millones de toneladas. Principalmente de maíz (7,6 millones de toneladas) y harina de soja (1,4 millones de toneladas), según el informe. Esto representó $ 2.800 millones de dólares, lo que se tradujo en $ 552 millones de dólares en impuestos a las exportaciones.
El gobierno podría generar ingresos fiscales significativamente mayores si devaluara el peso, como señaló AgriCensus. Implementaron la suspensión de nuevos impuestos a las exportaciones. Esta medida tiene como objetivo detener temporalmente las ventas. El objetivo es obtener mayores ingresos tras la reanudación de las licencias de exportación. Se establecería un nuevo valor para el peso.
La mayoría de las fuentes familiarizadas con el asunto esperaban que los impuestos se mantuvieran sin cambios en el corto plazo. El informe sugiere la posibilidad de ajustes en los impuestos para el complejo sojero. Además, se está considerando la viabilidad de aumentar los tipos aplicados a las exportaciones de cereales.