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La sequía y el cambio climático vuelven a poner en primer plano la cuestión de la gestión del agua en la agricultura.
La sequía y el cambio climático vuelven a poner en primer plano la cuestión de la gestión del agua en la agricultura. Desde el análisis de datos satelitales hasta las tecnologías de agricultura de precisión ahora listas para su aplicación a gran escala, aquí se encuentran todas las técnicas para aumentar el suministro de agua y limitar el desperdicio.
La prolongada sequía y el cambio climático del verano pasado han dejado claro a todos lo preciado que es el agua y cómo su escasez puede perjudicar las cosechas. “Pero las estrategias de intervención deben integrarse”, afirma Francesca Todisco, profesora de Hidráulica Agrícola y de Reestructuración Hidráulica-Forestal de la Universidad de Perugia, “es decir, deben tener en cuenta la conservación del suelo, el riesgo hidrogeológico, la reducción de los contaminantes y la protección de los ecosistemas.
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Todisco es el encargado de presentar hoy en Eima, el salón mundial de maquinaria agrícola, un informe sobre estrategias y tecnologías sostenibles para la gestión de los recursos hídricos en la agricultura. Un reportaje ilustrado forma parte de la presentación de la 54ª edición de Agriumbria, la exposición nacional de agricultura, ganadería y alimentación prevista del 31 de marzo al 2 de abril de 2023. El tema es, de hecho, muy actual. Baste decir que en los últimos meses la sequía, según las estimaciones de Coldiretti, ha provocado pérdidas de 10% de la producción agroalimentaria italiana, por un valor superior a los 6.000 millones de euros. "Queríamos centrarnos en uno de los temas de importancia fundamental para los retos del futuro en la agricultura", explica Stefano Ansideri, presidente de Umbriafiere. ¿Entonces qué debería ser hecho? Según Todisco, en primer lugar es necesaria una planificación adecuada que tenga en cuenta la complejidad del problema. En particular, son esenciales el incremento y mejoramiento de los sistemas de abastecimiento, la protección de la disponibilidad y calidad de los recursos hídricos, la modernización de los sistemas de riego y la educación para el uso consciente del agua. También es crucial monitorear las redes de distribución para combatir las fugas. Mientras que la difusión de técnicas de manejo basadas en los principios del riego de precisión es fundamental. “Y precisamente en lo que respecta a la agricultura de precisión”, destaca Todisco, “la tecnología está lista para su aplicación a gran escala. Las técnicas de alta tecnología disponibles incluyen el análisis y procesamiento de datos satelitales para identificar y caracterizar masas de agua.
Por: Agroenlace
