En una carta enviada el día 14 a la Ministra de Agricultura, Ganadería y Abastecimiento, Tereza Cristina Corrrea da Costa Dias, la Asociación Brasileña de Frigoríficos (ABRAFRIGO) pide al gobierno que intensifique sus esfuerzos en materia de negociaciones comerciales y diplomáticas, incluso con la Organización Mundial de Comercio, para demostrar los errores que rodean las propuestas legislativas con restricciones ambientales que están en marcha en el Reino Unido, la Unión Europea y Estados Unidos “con el objetivo de deconstruirlas y salvaguardar los más altos intereses comerciales de Brasil”. La carta también fue enviada a los ministros de Economía, Asuntos Exteriores y Medio Ambiente.
Según la entidad, que agrupa a empresas responsables de más de 50% de producción brasileña de carne vacuna, las iniciativas de estos países contra la deforestación en Brasil “han causado gran preocupación en varios sectores agroexportadores brasileños, y especialmente en el segmento de carne vacuna, un Ya que, de aprobarse dicha legislación, las empresas que adquieran productos brasileños comenzarán a exigir controles y certificaciones más rigurosas, aumentando inevitablemente los costos de cumplimiento y pudiendo incluso tornar inviable la producción para varias industrias y productores agrícolas”.
Recientemente, el Gobierno del Reino Unido abrió una consulta pública con el objetivo de recaudar subsidios con miras a redactar una nueva legislación que tenga como objetivo monitorear a las grandes empresas importadoras de productos agrícolas en relación con los riesgos relacionados con la deforestación forestal. “Es preocupante que este modelo de legislación, propuesto por el Reino Unido, también podría ser adoptado por otros importantes socios comerciales de Brasil, lo que podría resultar en un efecto dominó que podría llevar a pérdidas incalculables para la agroindustria y el comercio exterior brasileño”, afirma ABRAFRIGO. “Es necesario resaltar que Brasil tiene una de las leyes ambientales más restrictivas y rigurosas del mundo, lo que coloca la producción agrícola brasileña en un nivel superior en términos de exigencias ambientales en comparación con nuestros principales competidores internacionales”, afirma la entidad.
Por: Noticias Agrícolas
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