Imagen: Pixabay
Se espera que el regreso del fenómeno climático El Niño después de casi cuatro años traiga “una devastación sin precedentes a la economía mundial”, señala Bloomberg Economics. Según los modelos de la agencia internacional, el cambio de la fase más fría de La Niña a una fase de calentamiento podría “generar caos, especialmente en las economías emergentes de rápido crecimiento”.
El pronóstico llega en un momento en que la economía global ya es frágil y todavía lucha por recuperarse del Covid-19 y la guerra de Rusia en Ucrania. “Las redes eléctricas están tensas y los apagones son cada vez más frecuentes. El calor extremo crea emergencias de salud pública, mientras que la sequía aumenta los riesgos de incendio. Las cosechas se echan a perder, las carreteras se inundan y las casas se destruyen”, señala Bloomberg.
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Los analistas recuerdan que los años anteriores de El Niño tuvieron un marcado impacto en la inflación global, añadiendo 3,9 puntos porcentuales a los precios de las materias primas no energéticas y 3,5 puntos porcentuales al petróleo. El fenómeno también afectó el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), principalmente en Brasil, Australia, India y otros países vulnerables.
“Mientras el mundo lucha contra una inflación elevada y el riesgo de recesión, El Niño llega exactamente en el momento equivocado. Los bancos centrales tienen un poder más limitado”, dijo Bhargavi Sakthivel, economista de Bloomberg Economics. Según él, mientras las intervenciones políticas tienden a manipular la demanda, El Niño normalmente afecta la oferta.
Según la agencia, en India, por ejemplo, “la reducción de los monzones podría afectar las cosechas de arroz, algodón, maíz y soja. Estados Unidos volverá a sufrir tormentas invernales mortales, aunque habrá una caída general en el número de huracanes. Partes de África occidental y meridional podrían verse afectadas por la sequía, lo que afectaría la producción de cacao y maíz”.
“Australia podría sufrir graves sequías e incendios forestales, que perjudicarían la producción de trigo y otros cultivos. En Brasil y Colombia, el villano será la sequía, que puede afectar la producción de café, pero en Perú ocurre lo contrario: inundaciones generalizadas y una reducción de la pesca de anchoveta. En China, las temperaturas ya están matando al ganado y sobrecargando las redes energéticas”, añade.
"Cuando se produce un El Niño además de la tendencia de calentamiento a largo plazo, es como un doble shock", dijo Katharine Hayhoe, científica jefe de The Nature Conservancy. Los riesgos son más graves en los trópicos y el hemisferio sur: El Niño podría reducir casi medio punto porcentual el crecimiento anual del PIB en India y Argentina, según el modelo de Bloomberg Economics.
El aumento general de las temperaturas amplifica los efectos de los fenómenos climáticos. Los últimos tres años de La Niña (2020 a 2023) han sido más cálidos que todos los años de El Niño anteriores a 2015. La Organización Meteorológica Mundial calcula que existe una probabilidad de 98% de que la combinación de la acumulación de gases de efecto invernadero y el regreso de El Niño provoquen el próximo año. Este quinquenio es el más caluroso hasta el momento, empujando las temperaturas globales a territorio inexplorado.
"El Niño sólo empeorará los impactos del cambio climático que ya estamos experimentando: olas de calor más calientes, sequías más severas e incendios forestales más extremos", dijo Friederike Otto, profesora titular del Instituto Grantham para el Cambio Climático y el Medio Ambiente.
Fuente: Leonardo Gottems | Agroenlace