La igualdad de género en el sector agroalimentario podría salvar del hambre a 45 millones de personas, afirma la FAO



Imagen: Adobe Stock


Los retrasos en la superación de la discriminación contra las mujeres están generando pérdidas de casi 1 billón de dólares en productividad mundial.

La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, FAO, publicó este jueves (13) un informe que destaca la importancia de las mujeres en los sistemas agroalimentarios.

El estudio explica que poner fin a la desigualdad de género en el sector aumentaría el Producto Interno Bruto mundial en casi 1 billón de dólares y reduciría el número de personas con inseguridad alimentaria en 45 millones.

Peores condiciones

Según la agencia, 36% de la fuerza laboral femenina en el mundo trabaja en sistemas agroalimentarios. En África subsahariana, 66% de trabajadoras trabajan en el sector. Sin embargo, las condiciones laborales tienden a ser peores que las de los hombres.

Casos de irregularidad, informalidad, intensidad laboral y menores salarios revelan que el papel de la mujer está “marginado”. Las trabajadoras también tienen menos propiedad de la tierra, menos acceso al crédito y a la capacitación, y necesitan utilizar tecnologías diseñadas para los hombres.

El informe indica que cuando las economías atraviesan períodos de austeridad, las mujeres son las primeras en ser despedidas. A nivel mundial, 22% de mujeres en los segmentos no agrícolas de los sistemas agroalimentarios perdieron su empleo en el primer año de la pandemia de Covid-19, en comparación con 2% de hombres.

El estudio confirma que las mujeres son más vulnerables a las crisis climáticas y los desastres naturales, ya que las limitaciones de recursos y las normas de género discriminatorias pueden dificultarles la adaptación.

Por ejemplo, la carga de trabajo de las mujeres, incluidas las horas trabajadas en la agricultura, tiende a disminuir menos que la de los hombres durante crisis climáticas como el estrés por calor.

Protagonismo femenino

Otro punto de preocupación es la inseguridad. De los países analizados en la región de Asia y el Pacífico, Timor-Leste ocupa el segundo lugar en el ranking de violencia física contra las mujeres campesinas. Entre los países africanos incluidos en la muestra, Angola se encuentra entre los 15 con mayor índice de agresión.

Según el Director General de la FAO, QU Dongyu, las desigualdades de género son “endémicas” en los sistemas agroalimentarios. Afirma que a través del empoderamiento femenino “el mundo dará un salto” hacia los objetivos de erradicar la pobreza y crear un planeta libre de hambre.

En este sentido, se encontraron correlaciones positivas entre el nivel de empoderamiento de las mujeres y la diversidad dietética en Bangladesh, Ghana, Kenia, Mozambique, Ruanda y Timor-Leste.

Los autores del estudio explican que las intervenciones centradas en el protagonismo femenino podrían aumentar los ingresos de 58 millones de personas, mejorando la resiliencia de otros 235 millones.


Trabajo doméstico y acceso a guarderías.
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El informe de la FAO muestra que las intervenciones para mejorar la productividad de las mujeres tienen éxito cuando abordan el trabajo doméstico no remunerado.

La agencia también destaca que el acceso a la guardería tiene un gran efecto positivo en el empleo de las madres. Según la investigación, aumentar el empleo y la resiliencia de las mujeres requiere programas de protección social, educación, capacitación y una mayor seguridad en la tenencia de la tierra.

Aunque 75% de políticas relacionadas con la agricultura y el desarrollo rural en 68 países analizados reconocen el papel de las mujeres, sólo 19% incluyen metas relacionadas con el género.

Progreso insuficiente

La FAO dice que los avances en la reducción de las disparidades de género se han estancado o revertido. Las mejoras en nutrición, ingresos y acceso a empleos de calidad están estancadas. Para superar estos desafíos, la agencia propone recomendaciones para construir sistemas agroalimentarios más justos y sostenibles.

Estos incluyen mejorar el acceso de las mujeres a Internet móvil, que disminuyó de 25% a 16% entre 2017 y 2021 en países de ingresos bajos y medianos. Otra medida considerada importante es garantizar mejores derechos de propiedad de las tierras agrícolas para las mujeres.

Los sistemas agroalimentarios abarcan la producción agrícola primaria de productos alimentarios y no alimentarios, la producción de alimentos de origen no agrícola y la cadena de suministro de alimentos, desde el productor hasta el consumidor.

Por: datagro

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