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La Asociación Brasileña de Industrias de Aceites Vegetales (Abiove) revisó las informaciones y proyecciones del complejo sojero para 2021 y 2022. Las estimaciones de la entidad para 2021, que tienen en cuenta los análisis de los equipos de inteligencia de mercado de sus miembros, sufrieron ajustes. La producción aumentó en 300.000 toneladas en comparación con la estimación anterior, hasta 138,3 millones de toneladas, lo que refleja un aumento de la productividad.
En relación al aceite de soja, las exportaciones estimadas para este año también aumentaron. Para el mercado interno, Abiove aumentó ligeramente el consumo previsto de petróleo para uso alimentario, acompañado, sin embargo, de una disminución significativa del volumen destinado a la producción de biodiesel. Como resultado, la demanda interna se estima en 8,2 millones de toneladas, una disminución de 2% respecto a la proyección anterior.
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Para 2022, Abiove estima una nueva y más intensa reducción del consumo interno de aceite de soja, hasta menos de 8,0 millones de toneladas. Este volumen está por debajo del valor registrado en 2020 (8,5 millones de toneladas) y del esperado para 2021 (8,2 millones de toneladas).
La caída se debe, una vez más, a la menor necesidad de materia prima para la producción de biodiesel en el país, simultáneamente a la estabilidad del consumo con fines alimentarios, y redunda en la inevitable reorientación de una parte importante de la producción nacional hacia la exportación, ahora proyectada. en 1,6 millones de toneladas.
Abiove también revisó su estimación de producción de soja fresca en 2022 a 144,8 millones de toneladas, lo que se traducirá en mayores exportaciones (récord de 93,4 millones de toneladas) y existencias remanentes.
La trituración, proyectada en 48 millones de toneladas, está creciendo, pero a ritmos muy inferiores a los previstos para otras variables. En concreto, las proyecciones de la entidad para 2022 con relación a 2021 apuntan a un incremento anual de 5% en la producción de granos, 9% en las exportaciones, 5% en su stock y 3% en procesamiento. No se puede descartar la posibilidad de reducir la estimación de procesamiento, dados los stocks en tránsito, especialmente de salvado, y dependiendo de la evolución de los fundamentos del mercado internacional.
Al igual que la soja, ABIOVE también proyecta exportaciones récord de salvado, influenciadas principalmente por las prometedoras perspectivas de ventas para los países del Sudeste Asiático. La estimación de consumo interno de harina de soja alcanzará los 18,1 millones de toneladas en 2022, volumen superior a los volúmenes de 2019 y 2021, pero aún inferior al observado en 2020, cuando alcanzó los 18,9 millones de toneladas.
Los volúmenes importados serán mínimos, satisfaciendo las necesidades residuales y, por lo tanto, indicando la plena capacidad de la cadena de producción de soja en Brasil para satisfacer las necesidades tanto internas como de exportación.
Por: FECHA