Las acciones preventivas y de contingencia de los frigoríficos brasileños durante el período de pandemia fueron objeto de otra transmisión en vivo del proyecto Conexão Brasilia del Frente Parlamentario Agropecuario (FPA), realizada el pasado martes por la noche (04). A este debate asistieron el director ejecutivo de la ABPA, Ricardo Santin; la directora del Departamento de Inspección de Productos Animales del Ministerio de Agricultura, Ana Lúcia Viana; el director de Abrafrigo, Paulo Mustefaga y la coordinadora de Producción Animal del CNA, Lilian Figueiredo. Los participantes evaluaron los estándares de seguridad definidos por el gobierno, la situación actual de la industria cárnica en Brasil y las perspectivas hasta fin de año. El directo forma parte de una colaboración entre Canal Rural y el Frente Parlamentario para la Agricultura (FPA).
El director del Ministerio de Agricultura declaró que hoy no hay ninguna planta registrada ante el SIF (Servicio Federal de Inspección) con actividades paralizadas por contaminación del nuevo coronavirus. “Desde el inicio de la pandemia, el sector productivo y el gobierno federal adoptan medidas para contener la propagación de la enfermedad y mantener el funcionamiento de las actividades esenciales”, destacó Ana Lúcia Viana. Recordó que algunos mataderos suspendieron temporalmente la línea de producción, pero a estas alturas ya la reanudaron.
Según un relevamiento del Ministerio de Agricultura, en el país existen 3.299 establecimientos procesadores de carne y productos cárnicos registrados ante el Servicio de Inspección Federal (SIF), de los cuales 445 comercializan proteína animal.
Ana Lúcia Viana también aclaró que el manual de recomendaciones publicado en mayo, que luego se convirtió en la Ordenanza 19, publicada en junio, brindó seguridad jurídica y transparencia para que la industria actuara en este momento difícil. La norma fue publicada conjuntamente por los Ministerios de Agricultura, Salud y Economía. “Esta regla era tener estandarización. Todos los mataderos tienen normas de bioseguridad que deben adoptarse, independientemente de que haya pandemia o no”, señaló. La ordenanza establece procedimientos para la protección de los empleados y la salud de los alimentos producidos, que van desde el transporte, acceso a refrigeradores, vestuarios, cafeterías y áreas de descanso.
El director de Abrafrigo reforzó que la industria se anticipó y reforzó las reglas de seguridad incluso antes de que comenzara la cuarentena en Brasil. “La industria cárnica, cuando se declaró el estado de emergencia en Brasil y fue clasificada como actividad esencial, asumió el compromiso de garantizar toda la calidad y seguridad sanitaria de la producción”, destacó Paulo Mustefaga.
Todos los participantes también insistieron en reforzar que no existe evidencia científica de transmisión de Covid19 a través del consumo de alimentos y destacaron la calidad de la carne brasileña.
“La carne no transmite el Covid. El Ministerio de Agricultura brinda seguridad para que podamos obtener y seguir contando con insumos seguros y de calidad. En el caso de las exportaciones, la gente confía en nuestro producto. Son miles de contenedores exportados y nunca nadie ha enfermado”, enfatizó el director ejecutivo de la ABPA, Ricardo Santin. El dirigente de la ABPA también agregó que dentro del universo de frigoríficos en el territorio nacional, Brasil logró controlar la propagación de la enfermedad. Mencionó que sólo en plantas avícolas y porcinas hay 500 mil trabajadores.
Paulo Mustefaga también recordó que Brasil exporta a más de 150 países. “Brasil es el mayor exportador de carne vacuna del mundo y el segundo productor de carne vacuna, tenemos una industria extremadamente profesional y el sector viene trabajando muy seriamente para superar este desafío”.
El coordinador de Producción Animal de la CNA se mostró optimista con el trabajo que realizan los ministerios y organismos de defensa del estado con los mataderos. “Para nosotros en el sector productivo el trabajo en el campo continúa. Nuestra confianza permanece y nuestro papel es ayudar a los establecimientos y estamos disponibles”.
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Nuevos mercados
Al mismo tiempo que garantiza el suministro interno durante la pandemia, la agricultura brasileña sigue ganando espacio en el mercado internacional, según el representante de Mapa. “Abrimos nuevos mercados. Egipto, por ejemplo, autorizó a 42 establecimientos brasileños a suministrar carne, 27 de pollo y 15 de ternera. Ningún país dejó de comprar el producto brasileño”, explicó el director del ministerio.
Una visión que también comparte Lilian Figueiredo, de la CNA. “Las exportaciones han ido creciendo. Tenemos que aumentar nuestra producción en el campo y el productor ha invertido en tecnología. Nuestra perspectiva es conquistar nuevos mercados y mantener alimentos de calidad para nuestra población”, concluyó.
Por: FECHA
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