El presidente de Argentina, Mauricio Macri, programó una reunión sorpresa con líderes agrícolas del sector público y privado del país para discutir temas relacionados con el lanzamiento de una variedad de trigo genéticamente modificado. La actitud contradijo un comunicado de la Secretaría de Agroindustria de que esta variedad no sería liberada, ya que podría perjudicar las exportaciones de cereales. Antes de la reunión, nadie en el sector privado sabía exactamente por qué se realizaba la convocatoria. Pero el presidente Macri decidió conocer de primera mano todo sobre el caso del trigo HB4, un cultivo transgénico desarrollado por la biotecnológica nacional Bioceres para la tolerancia a la sequía, y la conveniencia de liberarlo o no.
Fuentes del portal eFarmNewsAr.com dijeron que el presidente Macri hizo muchas preguntas y prestó atención a cada respuesta. Se abstuvo de emitir sentencia u opinión, pero todos entendieron que el presidente quería involucrarse en el caso. "Fue un rico intercambio de ideas", dijo la fuente.
En el debate sobre la aprobación o no del trigo transgénico hay dos bandos, los que quieren y los que no quieren ser los primeros en lanzar la variedad. Según el portal, el presidente Macri ordenó a los presentes llegar a una solución que armonice los avances de la ciencia local con el flujo comercial que preserve las exportaciones y los mercados del trigo.
Del encuentro asistieron el secretario de Agroindustria, Luis Miguel Etchevehere, el presidente del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), Juan Balbín; el presidente del Grupo Los Grobo, Gustavo Grobocopatel; el presidente de Bioceres, Federico Trucco; el presidente de la molinería de trigo, Diego Cifarelli; el líder de la cadena del trigo (Argentrigo), David Hughes; y el principal asesor de Etchevehere, Santiago del Solar, entre otros.
Por: Agroenlace | Autor: Leonardo Gottems