El mercado del control biológico vive su cuarta revolución y Brasil es uno de los líderes en esta etapa, atendiendo a grandes cultivos además del uso de pesticidas químicos tradicionales. Para el investigador en Manejo Integrado de Plagas, Alexandre de Sene Pinto, expositor del evento, la aplicación de pesticidas biológicos debe alcanzar este año 15 millones de hectáreas tratadas en el país, considerando el número total de aplicaciones del producto por área cubierta. El sector creció, en promedio, entre 16% y 20% por año, afirmó el consultor durante el Foro Brasileño de Defensivas, promovido por ABC Bio – Asociación Brasileña de Empresas de Control Biológico y por Informa Agro, en São Paulo, este miércoles (30).
Entre los estados que más utilizan productos biodefensivos se encuentran São Paulo, Goiás, Mato Grosso y Minas Gerais. Los productos a base del hongo Trichoderma sp son los más aplicados, con un volumen de más de cinco millones de hectáreas tratadas, según Pinto. Esta expansión fue posible gracias a los avances en la tecnología de producción, la gestión y la adopción de innovaciones. “En macrobiología, por ejemplo, los drones son actualmente responsables de 35% de la aplicación de 1,7 millones de hectáreas de Trichogramma galloi. El avión sigue siendo el medio más común, con el 50%”.
El consultor también trajo investigaciones que muestran las razones por las cuales los productores rurales adoptan productos de control biológico: 29% dijo que se debe a la ineficacia de los pesticidas y los transgénicos. Otras razones son: la prohibición de algunos pesticidas y la aparición de nuevas plagas. "Sólo 2% aplica el producto por conciencia medioambiental, lo que demuestra que la cuestión de la rentabilidad es aún más fuerte".
Por otro lado, también destacó las barreras para un mayor avance de los productos biodefensivos, 51% de las cuales están relacionadas con la falta de información sobre la tecnología. “Un fuerte cambio de paradigma sería la inclusión obligatoria en las universidades con carrera de Ciencias Agrícolas de una disciplina de Tecnologías de Aplicación Biodefensiva”, consideró Pinto.
Para Glenio Martins de Lima Mariano, presidente de la Empresa de Asistencia Técnica y Extensión Rural del Estado de Minas Gerais (Emater–MG), este desconocimiento es una realidad y es necesario trabajar para que la difusión de información llegue a todos los agricultores. . “Los agentes biológicos tienen un gran potencial de crecimiento, pero en nuestro universo (pequeños productores rurales), son pocos los que dominan esta tecnología”, afirmó.
DETALLE DEL PANEL CASOS DE ÉXITO – Menos degradación ambiental, menor riesgo de contaminación para los trabajadores rurales, mejora general de las condiciones del suelo y menos residuos tóxicos en el producto final. Estos fueron los principales beneficios reportados en la presentación de Casos de Éxito de Productores que utilizaron productos biodefensivos durante el Foro ABC Bio. Las ventajas fueron descritas por el productor agrícola Paulo Eduardo García Junior, de Agropecuária 3G, que produce caña de azúcar y soja orgánicas utilizando únicamente productos biodefensivos.
Actualmente cultiva una superficie de 300 hectáreas con caña de azúcar y 60 hectáreas con soja, todas orgánicas, García informa que utiliza productos biodefensivos desde hace 20 años. “A lo largo de este tiempo, hemos mejorado nuestro manejo sustentable de plagas y concluimos que con biodefensivo no es posible eliminar el 100% de las plagas, sino reducir el daño que causan a los cultivos”, informa.
El productor, sin embargo, destaca que el sistema requiere un manejo que exige mucho más control que el cultivo convencional, que incluye, entre otros ítems, el desmalezado constante de las plantaciones para eliminar las malezas sin el uso de químicos. Destaca que se necesita especial atención con las formas de aplicación, ya que el biodefensivo, a diferencia del químico, es mucho más complejo y frágil en las fases de transporte, almacenamiento y aplicación. “Además, no tiene un efecto inmediato como ocurre con los productos químicos”, concluyó el ponente.
En este panel de casos de éxito, el Programa Cosecha Segura (PCS) presentó los resultados de la aplicación del proyecto en la cadena productiva del pimiento, que en 2013 encabezó la lista de alimentos más contaminados por plaguicidas, con 91,8% de no- conformidades en las muestras analizadas, según el informe del Programa de Análisis de Residuos de Plaguicidas en Alimentos (PARA) difundido por la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (ANVISA). El PCS tiene como objetivo garantizar una cosecha segura, a través de la transferencia de buenas prácticas agrícolas (BPA) a los productores y el manejo consciente del cultivo, buscando utilizar preferentemente productos orgánicos.
A través del proyecto se produjeron 1920 toneladas de pimiento, con un índice de cumplimiento de 80% de las muestras analizadas. Pero, para lograrlo, se realizaron más de 1000 visitas técnicas y se capacitó a más de 100 personas, además del mayor uso de pesticidas biológicos, que aumentaron a 31% contra 3% antes del inicio del PCS. “Hubo una caída de alrededor de 50% tanto en el uso de fungicidas como de insecticidas”, destacaron Francisco Araldo Pezzato Junior, gerente de Programa, y Thiago Ezio Moreira, gerente de Calidad del Grupo MNS.
También participaron de esta ronda de casos de éxito Tom Prado, director de Itaueira Agropecuária, y Roberto Risolia, gerente de Marketing de Stoller. Ambos detallaron los avances logrados por sus empresas con el uso de pesticidas biológicos.
Fuente: Agroenlace