La Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) publicó recientemente información crucial sobre el estado de cultivos agrícolas clave en la región. Analicemos en detalle el escenario actual de la soja, el maíz, el sorgo y el girasol.
Para la soja, concluyó la siembra, mostrando un avance de 1,2 puntos porcentuales en la última semana. Cabe destacar que 91% de las plantaciones se encuentran en condiciones clasificadas como Normal/Excelente. Además, 14% de la cosecha ya se encuentran en el período crítico, lo que indica un desarrollo significativo.
“Las altas temperaturas registradas en los días previos a este informe, combinadas con la falta de precipitaciones, resultaron en una caída de 13 puntos porcentuales en zonas que inicialmente tenían condiciones hídricas óptimas/adecuadas. Además, la condición de cultivo normal/excelente sufrió una reducción menor, de 6,5 puntos porcentuales, impulsada por los lotes ubicados en el Norte de La Pampa-Oeste bonaerense, que observaron síntomas de estrés hídrico”, comenta.
Los desafíos climáticos y las plagas afectan los cultivos: Impactos en maíz, sorgo y girasol
En el caso del maíz, los desafíos climáticos, como las altas temperaturas, resultaron en una caída de 15,4 puntos porcentuales en las condiciones óptimas/adecuadas del agua. Los cultivos tempranos se encuentran en etapa de llenado de grano, mientras que los tardíos ingresan al período crítico, principalmente en la región central del área agrícola.
La siembra de sorgo alcanzó 92,7% de campos, lo que indica un avance importante. Sin embargo, la presencia del pulgón amarillo genera preocupación y afecta la condición de los cultivos. Acerca de girasol, ya cosecharon 11.5% del área apta, alcanzando un rendimiento promedio de 16.8 qq/Ha. La cosecha se concentra principalmente en el norte y centro del área agrícola nacional.
“El avance de la cosecha se ubica en 11,5% del área total, registrando un rendimiento promedio de 16,8 quintales por hectárea. La condición óptima/adecuada del agua disminuye a 49% (en la semana anterior era 70%), debido a la combinación de dos factores: una alta demanda de agua por parte de los cultivos y del medio ambiente, asociada a las altas temperaturas. La evolución de las precipitaciones durante la próxima semana determinará el impacto de la falta de humedad en los lotes”, concluye.
Fuente: Leonardo Gottems | Agroenlace