A finales de octubre, Argentina enfrentó la primera vuelta de las elecciones presidenciales de 2024. Con dos candidatos y un candidato con nombres fuertes para asumir el cargo, la decisión sobre el escaño quedará para la segunda vuelta del 19 de noviembre, encabezada por el dos candidatos.
En la primera vuelta, Sergio Massa salió adelante en las votaciones frente a su oponente Javier Milei. Massa sigue siendo el favorito para la segunda vuelta, aunque el escenario es incierto hasta el momento.
Muchos argentinos señalan que los dos candidatos a la presidencia Segunda ronda crear un escenario muy similar al de Brasil en las elecciones de octubre de 2023 entre Lula y Bolsonaro, donde se enfrentan dos posiciones extremas para gobernar el país durante los próximos 4 años.
De un lado, Javier Milei con un discurso de derecha, apoyando plataformas similares a las de los expresidentes Jair Bolsonaro y Donald Trump, prometiendo acabar con el sistema político tradicional y populista que el actual gobierno instauró en Argentina.
Del otro lado, Sergio Massa, actual ministro de Economía del país, que lideró las votaciones en la primera vuelta, con un discurso más cercano al centroizquierda, pero que arrastra un pesimismo debido a una fallida política económica implementada por el actual gobierno, que empeoró la inflación del país.
Perspectivas posteriores a la segunda ronda
El precio de los commodities sigue el mínimo internacional de octubre, pero lo que más preocupa a los proveedores argentinos es cómo será la situación actual del dólar después de la segunda vuelta y cuáles serán las nuevas medidas para frenar no sólo la inflación de productos, sino también el ingreso y salida del dólar, que impacta en varias negociaciones en Argentina.
La segunda ronda suele ser un punto de atención no sólo por un posible aumento en el precio del aceite de girasol, ya que Argentina sigue siendo el mayor productor y exportador de América Latina, sino también por el flujo del producto luego de la segunda ronda. elecciones.
Incluso está prevista la formación de huelgas en algunos puntos estratégicos del país, lo que terminará dificultando el flujo del producto hacia los principales puertos, como Rosario y Buenos Aires.
Por: Júlia Vilela, corredora de la unidad Soft Oils