Un equipo de investigación en Colombia estudió el uso de ceras biológicas de aceite de palma como alternativa a los productos derivados del petróleo en cosmética, según informa Cosmetics Design Europe.
Investigadores de la Universidad Industrial de Santander descubrieron que siete ceras biológicas tenían altos puntos de fusión y bajos valores de penetración, además de no mostrar actividad citotóxica ni irritante, según el informe del 12 de octubre.
El artículo de investigación “Biowaxes from Palm Oil as Promising Candidates for Cosmetic Matrices and Pharmaceuticals for Human Use” se publicó por primera vez el 15 de junio en la revista Materials.
“Las ceras naturales derivadas de plantas o animales, como la cera de abejas, la carnauba y la candelilla, son renovables, biodegradables y no tóxicas, y tienen excelentes propiedades fisicoquímicas”, afirmó uno de los científicos del equipo de investigación.
Sin embargo, el coste de otras ceras naturales, como la cera de abejas, está aumentando debido al colapso de la población de abejas y a la escasez de suministro, según el informe.
Las siete ceras biológicas del estudio incluyeron aceite de palma africana hidroblanqueado refinado y aceite de palmiste refinado.
Estudios anteriores han demostrado que el aceite de palma es un posible sustrato. Puede utilizarse en la producción de ceras biológicas. Estas ceras tienen propiedades similares a la cera de abejas y a la carnauba, según informa Cosmetics Design Europe.
Evaluación de cera biológica en un estudio comparativo de propiedades y aplicaciones.
Los autores eligieron siete ceras biológicas entre 45 en el estudio. Realizaron varios experimentos para el estudio, algunos de ellos utilizaron cera de abejas y cera de carnauba como controles.
Después de hidrotratar el aceite de palma y el aceite de palmiste, el equipo realizó análisis y experimentos. Siguieron el informe para determinar el pH, el punto de fusión, el valor de penetración (o consistencia), la composición química, la actividad microbiológica, la toxicidad, la actividad antioxidante y la irritación.
Seis de las ceras biológicas eran de color blanco amarillento y sólidas, mientras que una era líquida. El pH osciló entre 4,4 y 5,4.
“El pH obtenido en los sobrenadantes de biocera está potencialmente relacionado con un riesgo bajo o nulo de efectos toxicológicos. Teniendo en cuenta que el pH de la superficie natural de la piel es ácido, en promedio 4,7”, escribieron los autores.
Debido a que el punto de fusión de las ceras biológicas era menor que el de la cera de control, se requeriría modificación química o refinamiento para lograr un punto de fusión más alto, si fuera necesario, para la aplicación. Los valores de penetración fueron similares a los de la cera de abejas.
Propiedades fisicoquímicas y su potencial en productos sensoriales.
Para los experimentos y análisis químicos, las ceras presentaron vibraciones similares a las del control, con una diferencia en el rango de 200 a 800 nanómetros. Las ceras biológicas mostraron bandas de baja intensidad o ninguna banda dentro de este rango, pero los controles mostraron picos de absorción.
Detectamos la ausencia de bacterias u hongos en los biológicos, y se comprobó que no provocan citotoxicidad en las líneas celulares estudiadas. Nadie registró actividad antioxidante en las ceras biológicas o de control ni detectó irritación al realizar pruebas en la piel del ratón.
“Las ceras biológicas BW1-BW7 obtenidas mediante el hidrotratamiento de aceites vegetales de palma y palmiste mostraron excelentes propiedades fisicoquímicas, incluida una dureza intermedia. El uso de este tipo de cera biológica puede eventualmente dar como resultado productos con características sensoriales relacionadas con su extensibilidad”, escribieron los autores.
Además, las ceras biológicas contenían alcoholes grasos, a diferencia de la carnauba y la cera de abejas, que no presentaban este tipo de familia química.